jueves, 24 de noviembre de 2011

LAS ISLAS (Parte 2) – LA ISLA DE MJLET Y LOS LAGOS DE AGUA SALADA

Vista del lago
Tras madrugón matutino pillamos el ferry rumbo a Mjlet. Habíamos leído maravillas de esta isla y de su parque nacional, con dos enormes lagos de agua salada y después de la ruta de la coca cola de Krka teníamos unas ganas enormes de disfrutar de la naturaleza en estado puro. Pero va a ser que el Croacia todo lo que huele a naturaleza y sea algo turístico, no es en estado puro ….. Al final, nos encontramos con dos lagos (preciosos eso sí) en medio de un gigantesco pinar que están rodeados por una pista forestal.
Nuestra cala solitaria

Como estaba claro que no había mucho más que ver que los lagos en sí, decidimos buscar un sitio medio apartado, y aunque no nos pegáramos la gran caminata, por lo menos nos relajaríamos con un bañito en las cristalinas aguas turquesas.

Total, que después de un rato dando vueltas por el lago nos topamos con precioso rincón medio escondido, con varias piedras perfectas para poner la toalla y pegarse un chapuzón. En esto que pensamos, cómo mola la piedra esa … pero está ocupada, a ver si se pirara la gente y nos quedáramos solos por aquí …. 5 minutos más tarde llegó un nubarrón y se puso a llover….

Bañito en el lago
Monasterio del lago
No obstante, como nosotros somos unos cabezotas, y nadie nos iba a fastidiar el baño (menos aún cuando nos habíamos quedado solos) decidimos quedarnos en el agua (que estaba muy calentita) hasta que pasara la tormenta. Media hora después, y arrugaos como una pasa…. Pudimos poner las toallas en la piedra que queríamos y disfrutar de nuestro rinconcito de naturaleza en soledad. A los primeros rayos de sol, le siguieron nuestros ronquidos (nos habíamos ganado una buena siesta). Después otro chapuzón viendo pececillos chulos (hasta había Nemos y todo), andar lo desandado, desconducir lo conducido y pillar el ferry de vuelta a tierra firme.

Al atardecer cruzamos la península de Peljesac, famosa por sus vinos. La verdad nos quedamos con las ganas de parar en alguna de las numerosas catas de vinos que se ofertaban en montones de casas, pero íbamos pegados de tiempo y queríamos llegar a Orebic para dormir antes de que se hiciera muy tarde.

El caso, es que justo llegando a Orebic, tuvimos un nuevo golpe de suerte. Como no teníamos muy claro dónde estaba el camping, nos dio por pararnos en una “tourist info” en la carretera un poco antes de llegar al pueblo. Digo “tourist info”, porque realmente no es una información turística al uso, si no un sitio donde te buscan alojamiento al instante. Total, que según aparcamos el coche y nos metemos en la “tourist info” se pone a diluviar sin control. Así que ya que estábamos allí en 1 minuto salimos con habitación a precio barato (tampoco era nada lujosa para que vamos a engañarnos). Y menos mal que nos dio por dormir en la habitación porque no paró de diluviar en toda la noche!!!.

No hay comentarios:

Publicar un comentario