Aprovechando que mi hermana Pilar se fue hace unos meses con Jesús y el peque a vivir su aventura a tierras de tréboles y duendes, decidimos cambiar nuestros planes de viaje para la segunda mitad del año y no perdernos la oportunidad ver con nuestros propios ojos, como el granuja de Elias empieza poco a poco a gatear y a hacer pedorretas.
Y de esta manera surgió un viaje que en realidad fueron tres, en dos fases distintas:
1 - Escapadita a Dublín con mis padres y visita a la familia irlandesa
2 - Puente de naturaleza, castillos y playas con Patri ... con revisita a la familia irlandesa
3 - Semana de Rodríguez con Chime recorriendo en coche el resto de la Isla
Durante estas casi dos semanas de viaje, me dio tiempo a conocer la Irlanda más profunda de pubs y parroquianos, la naturaleza salvaje de prados, acantilados y paisajes sacados de los libros de Tolkien... pero sobre todo pude disfrutar de mis padres, de mi hermana Pilar, de Jesús, del pequeño Eli, de Patri y de Chime.
Se que es un tópico decir de que dentro de un viaje hay mil pequeños viajes ... pues sin duda no hay nada que más se aplique a lo que viví en los meses de octubre y noviembre en Irlanda
.... ahora os cuento
No hay comentarios:
Publicar un comentario