Después de casi tres meses de viaje, y tras más de dos semanas torrándonos al sol, hemos visto llover. Qué sensación! Hemos llegado a Dharamsala, la casa en el exilio del Dalai Lama, la falda de la cordillera del Himalaya. Hace fresquito por la noche, todo es verde y se respira aire puro (hoy me he sonado las narices y el pañuelo no estaba marrón).
Dharamsala (o Mac Leod... Que es el pueblito que está arriba y donde se aloja el Dalai Lama) nos ha encantado y un poquito decepcionado a la vez. Decepcionado porque cuando llegas a la casa del Dalai Lama, lo que imaginas es que vas a encontrarte un palacio gigante de estilo budista, como el de Lhasa en el Tíbet, todo lleno de monjes, con olor a incienso y velas y runrún de mantras tibetanos por todos lados... Pues no, nada más lejos de la realidad... Resulta que el Dalai Lama, cuando anda por aquí se aloja en un sencillo chalet, que da salida a una especie de polideportivo, con una carpa como las del circo y listo. Eso es lo más espiritual que vas a encontrar en Dharamsala. Además, cuando no está, hay una desbandada general de monjes y apenas se ven túnicas rojas por la calle. Vaya hombre! Jejejeje, pero eso pasa por dejarse llevar por el nombre...
No obstante, y una vez pasado esa decepción inicial, Mac Leod tiene muchas cosas que ofrecer. Pasear por las calles es como volver a estar en China. Aquí apenas se ven caras de Indios. La mayoría de la gente o es turista o es refugiada tibetana. Si quieres aprender sobre el budismo, este es un buen lugar. La cantidad de cursos y actividades relacionadas es super numerosa. Que lo que te gusta es el yoga y la meditación, aquí también encontrarás tu sitio. Y si disfrutas con la naturaleza y la montaña, has llegado al lugar adecuado.
Entre unas cosas y otras, al final nos hemos quedado aquí cinco días. Casi una semana en la que ha dado tiempo a meditar por las mañanas, hacer voluntariado de conversación en inglés con los refugiados tibetanos por la tardes y disfrutar mucho de la naturaleza y la montaña.
Un día entero, lo hemos pasado con los pies a remojo y descansando tranquilamente junto a un río con una cascada. Otro día hemos hecho una rutilla (con noche includida) para llegar a un collado a 3000 metros de altura, donde hemos visto los Himalayas de cerca! Qué sensación ahí sentados en una praderita verde, viendo esos gigantes delante. Buenos días, buenos días ... Y tú cuánto mides? Pues yo casi 6000 metros …. Alucinante! Hasta hemos hecho un super fuego para calentarnos por la noche, … Qué frío dan los picos nevados cuando se los ve desde tan cerca!!!
La verdad que Mac Leod, y sobre todo Dharamkot un pueblecito aún más pequeño que está a dos kilómetros, son sitios donde puedes quedarte 5 días o varios meses. Sorprende ver la super colonia de israelíes que hay aquí (este país está lleno de israelíes ... Les encanta venir de vacaciones). Dharamkot es para muchos de ellos, como si te vienes de vacaciones al pueblo. Está lleno de familias con niños, y por tener tiene hasta una guardería.
Muchas veces a lo largo del viaje por la India nos preguntamos donde están todos los miles de turistas que se supone hay en el país. Y es que a pesar de haber recorrido todo el Rajasthán (la zona más turística), a penas hemos tenido la sensación de turismo de masas. La respuesta está pues en sitios con Mc Leod o Dharamkot (o como Hampi, el monasterio donde estuvimos meditando, etc...). Estoslugares son auténticas colonias de turistas, o más que turistas al uso, de vacacionantes de larga estancia o residentes. Es curioso y chocante a la vez, encontrarte a tanto extranjero que pasa semanas, meses o años en este lugar. Son gente que no viene a conocer la India, si no en busca de un sitio, de su sitio. Para nosotros se hace un tanto extraño, pues nos cuesta estar parados en un lugar.
Por otro lado, y tenemos esta discusión a menudo, siempre llegamos a la concusión de que no necesitamos venir a un sitio así a descansar o vivir, pudiendo pasear por la Galea en un día soleado, o teniendo la posibilidad de desayunar en la Villa con las vistas de la Sierra de Gredos (por qué el ser humano muchas veces se empecina en buscar tan lejos algo que tiene tan cerca?). En Myanmar, encontramos un chico español que había viajado por todo el mundo y nos decía... Que “cuando creías haberlo visto todo, entonces ibas a la India, y la India te cambiaba la vida”. Nuestra conclusión sin embargo es que la India generalmente solo te cambia la vida si has venido aquí en busca de ello. No es una decepción, sino una constatación de que son muchos los motivos que llevan a la gente a venir a este país y si normalmente hay muchas formas distintas de viajar, aún hay muchas más (que hasta ahora no conocíamos) si donde vienes es a la India.
El último día lo hemos pasado en el porche de la habitación viendo las distintas opciones que tenemos para apurar estas algo más de dos semanitas que nos quedan de viaje. Está ya claro que no nos va a dar tiempo a ver todo lo que nos gustaría así que tenemos el dilema de qué dejar para la próxima vez... De momento nos vamos a Delhi, y una vez allí decidiremos como gastar estos últimos días de vacaciones... Increíble que ya hayan pasado casi tres meses desde que salimos de Shanghai, ponemos el contador y echaremos el resto para disfrutar al máximo de lo que nos queda!
Os dejamos el link a las fotos:
Fotos de Dharamsala
Dharamsala (o Mac Leod... Que es el pueblito que está arriba y donde se aloja el Dalai Lama) nos ha encantado y un poquito decepcionado a la vez. Decepcionado porque cuando llegas a la casa del Dalai Lama, lo que imaginas es que vas a encontrarte un palacio gigante de estilo budista, como el de Lhasa en el Tíbet, todo lleno de monjes, con olor a incienso y velas y runrún de mantras tibetanos por todos lados... Pues no, nada más lejos de la realidad... Resulta que el Dalai Lama, cuando anda por aquí se aloja en un sencillo chalet, que da salida a una especie de polideportivo, con una carpa como las del circo y listo. Eso es lo más espiritual que vas a encontrar en Dharamsala. Además, cuando no está, hay una desbandada general de monjes y apenas se ven túnicas rojas por la calle. Vaya hombre! Jejejeje, pero eso pasa por dejarse llevar por el nombre...
No obstante, y una vez pasado esa decepción inicial, Mac Leod tiene muchas cosas que ofrecer. Pasear por las calles es como volver a estar en China. Aquí apenas se ven caras de Indios. La mayoría de la gente o es turista o es refugiada tibetana. Si quieres aprender sobre el budismo, este es un buen lugar. La cantidad de cursos y actividades relacionadas es super numerosa. Que lo que te gusta es el yoga y la meditación, aquí también encontrarás tu sitio. Y si disfrutas con la naturaleza y la montaña, has llegado al lugar adecuado.
Entre unas cosas y otras, al final nos hemos quedado aquí cinco días. Casi una semana en la que ha dado tiempo a meditar por las mañanas, hacer voluntariado de conversación en inglés con los refugiados tibetanos por la tardes y disfrutar mucho de la naturaleza y la montaña.
Un día entero, lo hemos pasado con los pies a remojo y descansando tranquilamente junto a un río con una cascada. Otro día hemos hecho una rutilla (con noche includida) para llegar a un collado a 3000 metros de altura, donde hemos visto los Himalayas de cerca! Qué sensación ahí sentados en una praderita verde, viendo esos gigantes delante. Buenos días, buenos días ... Y tú cuánto mides? Pues yo casi 6000 metros …. Alucinante! Hasta hemos hecho un super fuego para calentarnos por la noche, … Qué frío dan los picos nevados cuando se los ve desde tan cerca!!!
La verdad que Mac Leod, y sobre todo Dharamkot un pueblecito aún más pequeño que está a dos kilómetros, son sitios donde puedes quedarte 5 días o varios meses. Sorprende ver la super colonia de israelíes que hay aquí (este país está lleno de israelíes ... Les encanta venir de vacaciones). Dharamkot es para muchos de ellos, como si te vienes de vacaciones al pueblo. Está lleno de familias con niños, y por tener tiene hasta una guardería.
Muchas veces a lo largo del viaje por la India nos preguntamos donde están todos los miles de turistas que se supone hay en el país. Y es que a pesar de haber recorrido todo el Rajasthán (la zona más turística), a penas hemos tenido la sensación de turismo de masas. La respuesta está pues en sitios con Mc Leod o Dharamkot (o como Hampi, el monasterio donde estuvimos meditando, etc...). Estoslugares son auténticas colonias de turistas, o más que turistas al uso, de vacacionantes de larga estancia o residentes. Es curioso y chocante a la vez, encontrarte a tanto extranjero que pasa semanas, meses o años en este lugar. Son gente que no viene a conocer la India, si no en busca de un sitio, de su sitio. Para nosotros se hace un tanto extraño, pues nos cuesta estar parados en un lugar.
Por otro lado, y tenemos esta discusión a menudo, siempre llegamos a la concusión de que no necesitamos venir a un sitio así a descansar o vivir, pudiendo pasear por la Galea en un día soleado, o teniendo la posibilidad de desayunar en la Villa con las vistas de la Sierra de Gredos (por qué el ser humano muchas veces se empecina en buscar tan lejos algo que tiene tan cerca?). En Myanmar, encontramos un chico español que había viajado por todo el mundo y nos decía... Que “cuando creías haberlo visto todo, entonces ibas a la India, y la India te cambiaba la vida”. Nuestra conclusión sin embargo es que la India generalmente solo te cambia la vida si has venido aquí en busca de ello. No es una decepción, sino una constatación de que son muchos los motivos que llevan a la gente a venir a este país y si normalmente hay muchas formas distintas de viajar, aún hay muchas más (que hasta ahora no conocíamos) si donde vienes es a la India.
El último día lo hemos pasado en el porche de la habitación viendo las distintas opciones que tenemos para apurar estas algo más de dos semanitas que nos quedan de viaje. Está ya claro que no nos va a dar tiempo a ver todo lo que nos gustaría así que tenemos el dilema de qué dejar para la próxima vez... De momento nos vamos a Delhi, y una vez allí decidiremos como gastar estos últimos días de vacaciones... Increíble que ya hayan pasado casi tres meses desde que salimos de Shanghai, ponemos el contador y echaremos el resto para disfrutar al máximo de lo que nos queda!
Os dejamos el link a las fotos:
Fotos de Dharamsala
Que maravilla de sitio. Que verde. Y la nieve, esta precioso.
ResponderEliminarMe ha encantado y les he leído a todos.
Seguro que estos dias los vais a disfrutar al máximo. Y nos lo contareis.
Me gusta que dediqueis tiempo al voluntariado.
Y estas muy bien en las fotos.
Cuantas historias
Besos y seguir escribiendo
Mama
Muy bonitas las fotos de los Himalaya....los teniais tan cerca ...que hasta se nota el frio en las fotos...y como dice abuela y siempre en el borde de la piedra...
ResponderEliminarJuan el fuego se ve mejor en estas fotos y si....lo hiciste muy requetebién...jejeje
No se como es el lugar donde vive el Dalai Lama pero a mi me anima el que sea un lugar carente de riqueza y que le acerque un poco a la gente de a pie....a sus iguales en creencias......debería cundir el ejemplo
Estoy de acuerdo con vosotros a veces nos vamos a buscar cosas fuera que tenemos al lado y no sabemos ver......ni apreciar....tambien es verdad que cuando las buscamos fuera.....vamos predispuestos a hacerlo,la mayoría de las veces influidos por lo que nos han contado....mas relajados....mas abiertos a encontrar.....y unas veces encuentras y otras descubres que lo tenias mas cerca de lo que creías.....solo necesitabas verlo.
Hasta otro ratito,
Os queremos y os echamos de menos. Un beso muy fuerte
Abuela Dioni y mama Mila