La siguiente historia va de contrastes, de falsas impresiones, de prejuicios, de las dos mitades de un todo: de la India.
Después de Hampi, con sus ruinas y su naturaleza, cambiamos de tercio y saltamos a las junglas de asfalto de Mumbai y Dehli. La idea era visitar a Pooja y Hindol (en Mumbai) y a Shalin (en Dehli), tres amigos de Shanghai, disfrutar de unos días todos juntos y conocer ambas ciudades de mano de unos locales.
La verdad que íbamos con bastantes prejuicios, pensando encontrar ciudades atestadas de mendigos, super sucias. Ciudades intimidadoras, por las que no poder caminar tranquilo. Y es que por ejemplo al pensar en Mumbai, sin duda alguna lo primero que nos viene a la mente es la oscarizada película “Slumdog Millionaire”. Uno se imagina una ciudad que es una gran chabola, ... Y nada más lejos de la realidad. No quiere decir que los slums (barriadas pobres) no existan. De hecho, el slum más grande de Asia se encuentra en Mumbai. Pero es injusto quedarse con esa imagen de Mumbai. Mumbai, al igual que Delhi, al igual que el resto de la India que hemos conocido hasta ahora, es mucho más que la suciedad y pobreza que nos gusta destacar del país mientras enseñamos las fotos del viaje.
Tenemos que darle las gracias a Pooja, a Hindol y a Shalin, por habernos enseñado y haber disfrutado con nosotros de esa otra cara de la moneda. La de una India que está cambiando, abanderada por una creciente clase media. La India de calles limpias, de museos interesantes, la India de verdes jardines y de restaurantes con encanto. Porque eso también es India, mucho más allá del tópico fácil.
Para nosotros Mumbai será siempre esa ciudad donde paseamos tranquilamente entre edificios coloniales. Esa ciudad que nos recordó a Londres, con su torre del reloj y sus autobuses rojos de dos plantas. Una ciudad en la que se encuentra la casa más cara del mundo, todo un edificio de 60 plantas en el que viven 3 personas y que está valorada en más de 1.2 billones de dolares. Mumbai es también esa ciudad con un malecón super agradable, lleno de gente paseando y parejas contemplando el atardecer. Y es que Mumbai, a pesar de no ser el paraíso que decía la canción de Mecano (Hawai, Bombay...son dos paraísos), tampoco es el desastre que vemos en el cine. La puerta de india, el hotel Taj, Malabar Hill, la universidad, la Alta Corte... La lista de lugares interesantes es mucho más larga de lo que cabría esperar.
Y si Mumbai es muy chula, Dehli lo es aún más. Porque además de toda la modernidad de Mumbai, la ciudad respira historia por los cuatro costados. Muchos de los turistas con los que hemos hablado, echan pestes de la ciudad. Pero también es verdad, que la mayoría de ellos únicamente visita la ciudad vieja y sale corriendo hacia otro lugar. Es muy entendible que si tu primera imagen de la india, de camino al fuerte rojo y la mezquita, es la de un barrio que parece que le ha caído una bomba encima, con las calles llenas de basura, mendigos por todas partes, pedigüeños y vendedores super agresivos, entonces quieras salir corriendo cuanto antes de ahí. Pero y que tal si en lugar de salir corriendo, te paras, miras el mapa y tomas el metro hacia nueva Dehli o más al sur? Pues entonces descubrirás una ciudad muy distinta. Una ciudad con mausoleos increíbles, rodeados de cuidados parques. Una ciudad de grandes avenidas, de zonas super agradables para comer, tomar algo o ir de compras... Una ciudad super cool, con una vida nocturna super animada. Una ciudad para disfrutar, una ciudad de la que no te querrás marchar.
Al final, ha sido casi una semana lo que hemos pasado entre ambas ciudades. Una semana inolvidable. Un tiempo en el que hemos disfrutado de la hospitalidad india. Hemos descubierto dos ciudades increíbles de mano de nuestros amigos y sobre todo nos hemos sentido como en casa. Muchas gracias a Pooja, a sus padres y hermana que nos acogieron en su casa, a Hindol a Shalin a sus novias y a todos aquellos que tanto nos han dado en estos días. Nunca olvidaremos como nos habéis tratado, como nos habéis hecho sentir, nunca olvidaremos lo felices que hemos sido estos días a vuestro lado. Gracias, muchas gracias!!! De todo corazón!!!
Después de Hampi, con sus ruinas y su naturaleza, cambiamos de tercio y saltamos a las junglas de asfalto de Mumbai y Dehli. La idea era visitar a Pooja y Hindol (en Mumbai) y a Shalin (en Dehli), tres amigos de Shanghai, disfrutar de unos días todos juntos y conocer ambas ciudades de mano de unos locales.
La verdad que íbamos con bastantes prejuicios, pensando encontrar ciudades atestadas de mendigos, super sucias. Ciudades intimidadoras, por las que no poder caminar tranquilo. Y es que por ejemplo al pensar en Mumbai, sin duda alguna lo primero que nos viene a la mente es la oscarizada película “Slumdog Millionaire”. Uno se imagina una ciudad que es una gran chabola, ... Y nada más lejos de la realidad. No quiere decir que los slums (barriadas pobres) no existan. De hecho, el slum más grande de Asia se encuentra en Mumbai. Pero es injusto quedarse con esa imagen de Mumbai. Mumbai, al igual que Delhi, al igual que el resto de la India que hemos conocido hasta ahora, es mucho más que la suciedad y pobreza que nos gusta destacar del país mientras enseñamos las fotos del viaje.
Tenemos que darle las gracias a Pooja, a Hindol y a Shalin, por habernos enseñado y haber disfrutado con nosotros de esa otra cara de la moneda. La de una India que está cambiando, abanderada por una creciente clase media. La India de calles limpias, de museos interesantes, la India de verdes jardines y de restaurantes con encanto. Porque eso también es India, mucho más allá del tópico fácil.
Para nosotros Mumbai será siempre esa ciudad donde paseamos tranquilamente entre edificios coloniales. Esa ciudad que nos recordó a Londres, con su torre del reloj y sus autobuses rojos de dos plantas. Una ciudad en la que se encuentra la casa más cara del mundo, todo un edificio de 60 plantas en el que viven 3 personas y que está valorada en más de 1.2 billones de dolares. Mumbai es también esa ciudad con un malecón super agradable, lleno de gente paseando y parejas contemplando el atardecer. Y es que Mumbai, a pesar de no ser el paraíso que decía la canción de Mecano (Hawai, Bombay...son dos paraísos), tampoco es el desastre que vemos en el cine. La puerta de india, el hotel Taj, Malabar Hill, la universidad, la Alta Corte... La lista de lugares interesantes es mucho más larga de lo que cabría esperar.
Y si Mumbai es muy chula, Dehli lo es aún más. Porque además de toda la modernidad de Mumbai, la ciudad respira historia por los cuatro costados. Muchos de los turistas con los que hemos hablado, echan pestes de la ciudad. Pero también es verdad, que la mayoría de ellos únicamente visita la ciudad vieja y sale corriendo hacia otro lugar. Es muy entendible que si tu primera imagen de la india, de camino al fuerte rojo y la mezquita, es la de un barrio que parece que le ha caído una bomba encima, con las calles llenas de basura, mendigos por todas partes, pedigüeños y vendedores super agresivos, entonces quieras salir corriendo cuanto antes de ahí. Pero y que tal si en lugar de salir corriendo, te paras, miras el mapa y tomas el metro hacia nueva Dehli o más al sur? Pues entonces descubrirás una ciudad muy distinta. Una ciudad con mausoleos increíbles, rodeados de cuidados parques. Una ciudad de grandes avenidas, de zonas super agradables para comer, tomar algo o ir de compras... Una ciudad super cool, con una vida nocturna super animada. Una ciudad para disfrutar, una ciudad de la que no te querrás marchar.
Al final, ha sido casi una semana lo que hemos pasado entre ambas ciudades. Una semana inolvidable. Un tiempo en el que hemos disfrutado de la hospitalidad india. Hemos descubierto dos ciudades increíbles de mano de nuestros amigos y sobre todo nos hemos sentido como en casa. Muchas gracias a Pooja, a sus padres y hermana que nos acogieron en su casa, a Hindol a Shalin a sus novias y a todos aquellos que tanto nos han dado en estos días. Nunca olvidaremos como nos habéis tratado, como nos habéis hecho sentir, nunca olvidaremos lo felices que hemos sido estos días a vuestro lado. Gracias, muchas gracias!!! De todo corazón!!!
Os dejamos el enlace a las fotos de Mumbai y Delhi:
Unas fotos muy bonitas...Nos alegra que vuestros amigos os hayan ayudado que evitar los tópicos de la India y os hayan enseñado también la parte un poco mas bonita y menos tópica,pero que también existe.
ResponderEliminarNos ha llamado la atención la ropa tendida y perfectamente alineada en las terrazas de las chavolas...quiere decir que hay personas que trabajan lavando ropa para restaurantes o para otras personas....abuela Dioni dice que como aquí,en su época joven.
Bueno nos ha gustado leeros de nuevo y de que lo hayais disfrutado con vuestros amigos
un besazo de abuela Dioni y mio.
No, otra vez la lagrimita.
ResponderEliminarMe emocionais.
Dar las gracias a esas familias de nuestra parte y estaremos encantados de que vengan a conocernos. Hay edificios que parecen de Bilbao. Je je je.
Las dos ciudades preciosas.
Cada cual con su encanto, y que bien que nos enseñeis la otra india la que no enseñan.
Que viaje mas maravilloso, siempre lo recordareis.
Seguir escribiendo, que todos queremos leeros.
Besos
Mama
Ah! Y esa miseria por desgracia, la hay en todas partes. Una gran pena.
ResponderEliminarNo hay duda de que la relación que habéis tenido con estos chicos ha sido seria, y su comportamiento con vosotros al parecer responde a ello , nos alegra a mi en particular como en un mundo tan deshumanizado, la relación de amistad entre personas ajenas a los intereses mas o menos destructores de la paz, se mantiene y se incrementa dia a dia.
ResponderEliminarBueno parejita dejémonos de charlas profundas seguir disfrutando aquí estamos los que sanamente os envidian y,,,,,
os quieren,
Por cierto Juan tus relaciones con cierto banco se han normalizado ?
Besos Pa
Que recuerdos cuando he visto Delhy ¡¡¡¡¡ en el fuerte rojo estuvimos nosotros y lo hemos recordado totalmente y eso que hace 24 años que estuvimos....... todavía me queda memoria..... lo que habra cambiado, Estuvimos en viaje organizado nada que ver de como habeis ido vosotros....
ResponderEliminarQue suerte que tuvieseis amigos alli la vision de la ciudad cambia y ademas si ademas convives con gente del lugar el recuerdo es mucho mas real .
Me voy porque he quedado con tu madre, ya volvere a conectarme. besooos